Durante el fin de semana de nochebuena y navidad el gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires realizó un operativo con controles de alcoholemia con el doble de puestos en distintos puntos estratégicos de la Ciudad. Se les realizó el test a 4 mil vehículos y se retuvieron 38 carnet de conducir y sus automóviles, debido a que sus conductores superaban el máximo de alcohol en sangre permitido. Este operativo se llevará a cabo nuevamente el fin de semana de año nuevo.
Durante la noche de Navidad y el 25 luego del mediodía la Ciudad duplicó los controles de alcoholemia en diversos lugares estratégicos y concurridos para detectar a personas que por su estado de ebriedad no estaban en condiciones de manejar los vehículos. Los funcionarios públicos de Control de Tránsito porteño realizaron 4.204 controles en el marco del operativo desarrollado en nochebuena y navidad. De ese total, 38 conductores fueron inhabilitados por un mínimo de dos meses por dar positivo en alcoholemia, debido a que tenían más de 0,5 gramos por litro en sangre de alcohol.
En la tarea, se sumaron 20 puntos a los que se distribuyen habitualmente en el territorio porteño y Manuela López Menéndez, secretaria de Transporte y Obras Públicas de la Ciudad de Buenos Aires, expresó: “Este año duplicamos la cantidad de puestos de control durante las Fiestas en distintos puntos rotativos de Buenos Aires para cuidar a los vecinos y vecinas. Es necesario entender y transmitir que el alcohol y el volante no son compatibles: si vas a manejar no tomes”.
En cuanto a la reglamentación actual, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires permite un límite máximo tolerado de alcohol en sangre de 0,5 gr/l para vehículos particulares, 0,2 gr/l para motociclistas y tolerancia cero para principiantes y conductores profesionales. Cabe señalar que se está discutiendo una Ley federal de alcohol cero al volante y que en la provincia de Buenos Aires ya se aprobó una norma similar.
El procedimiento indica que si durante el control de alcoholemia el conductor se encuentra por encima de esos valores deberá entregar el carnet y el vehículo que será acarreado a uno de los puestos de la Ciudad, luego, para recuperarlo está obligado a realizar un taller de seguridad vial. Según la información brindada por la Ciudad, entre enero y noviembre de este año se retuvieron 4774 licencias por al menos dos meses.
A su vez, los funcionarios no indican previamente los sitios donde se ubican los controles son aleatorios y estos no están disponibles como información pública ya que perderían el efecto sorpresa para los conductores que podrían esquivar los controles. De todos modos, los operativos suelen realizarse en zonas nocturnas muy concurridas, en avenidas principales y en otras trazas importantes.
El método que utiliza la Ciudad en estos controles es el embudo para agilizar la circulación donde la dinámica consiste en encauzar el flujo vehicular con el cierre de varios carriles de avenida o calle y así poder verificar un mayor número de conductores.
En cuanto los conductores llegan a los puestos de control, se le acercará un agente de tránsito que le solicitará la documentación como licencia de conducir, cédula verde y seguro. Luego se realiza el examen con equipo tipo alómetro (para determinar si hay presencia de alcohol). A quienes den positivo en el examen alómetro se les realizará el test con alcoholímetro para determinar el dosaje.