La Fiscalía PCyF 35, especializada en delitos complejos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, desbarató recientemente una banda dedicada al robo de vehículos, que operaba en la Ciudad y la Provincia de Buenos Aires. Esta operación culminó con la prisión preventiva para los tres imputados, quienes habían sido arrestados el martes pasado en un operativo encubierto mientras intentaban vender un automóvil robado.
La investigación liderada por la fiscal Celsa Ramírez reveló que la banda se especializaba en el robo de autos de alta gama. Utilizaban inhibidores de señales para desactivar sistemas de alarma y empleaban técnicas avanzadas para modificar la numeración de chasis y motor, así como cambiar la chapa patente de los vehículos. Posteriormente, los autos eran ofrecidos en venta a través de MarketPlace de Facebook, una plataforma en la que la banda logró evadir el control por un tiempo considerable.
El caso más reciente involucró a un Honda CR-V, que había sido sustraído en mayo a un funcionario municipal en San Miguel. La causa inicial estaba a cargo de la UFI N°24 de Malvinas Argentinas, del Departamento Judicial de San Martín. Sin embargo, la intervención de la Fiscalía Especializada en Delitos Complejos de la Ciudad se produjo cuando la División Sustracción de Automotores y Autopartes de la Policía de la Ciudad detectó una publicación en MarketPlace que coincidía con las características del vehículo robado.
En este sentido, los investigadores idearon un plan para atrapar a los delincuentes en el acto. Se hicieron pasar por compradores interesados y coordinaron una cita en una estación de servicio en Saavedra, que fue vigilada de cerca tanto por la fiscalía como por el personal policial. Durante el encuentro, se verificó que la matrícula y la cédula de identificación del vehículo eran falsas y que los números de motor y chasis habían sido borrados. Además, se encontró un dispositivo inhibidor de señales, lo que corroboró la preparación de los imputados para la venta del auto robado.
El viernes pasado se llevó a cabo una audiencia en la que el fiscal interinamente a cargo, Mauro Tereszko, solicitó la prisión preventiva para los detenidos. Esta solicitud fue concedida por el juez Agustín Riggi, titular del Juzgado PCyF 19. Los fiscales Celsa Ramírez y Mauro Tereszko han caratulado el caso como asociación ilícita, hurto agravado de automotores, encubrimiento con ánimo de lucro, falsificación y alteración de documentos públicos. Los imputados enfrentan penas de hasta 17 años de prisión.
En la misma línea, la causa continúa bajo investigación para determinar si hay otros posibles involucrados en la red delictiva. Además, se están examinando otros vehículos que podrían haber sido sustraídos y adulterados para su posterior comercialización. Este caso pone de manifiesto la eficacia de las estrategias de investigación y el compromiso de las autoridades en la lucha contra el delito organizado en la Ciudad y sus alrededores.