Se trata del Club Platense, que luego de haber ascendido a Primera División, se fijó como meta, volver al barrio de Saavedra.
Tal como ocurre con el Club San Lorenzo, que busca volver al barrio porteño de Boedo, ahora el Club Platense, se propuso realizar este mismo objetivo: volver a su barrio original, Saavedra.
En este sentido, el Club Platense, después de lograr el ascenso a Primera División, comenzó a trabajar para que su estadio vuelva al barrio porteño de Saavedra,donde estuvo hasta 1971.
Para esto, es que en algunos días se llevará a cabo la Audiencia Pública en la Legislatura porteña.
En tanto, desde el “Calamar” informaron que la audiencia pública se realizará el próximo miércoles 23 de marzo, a partir de las 13 horas.
La Audiencia Pública se llevará a cabo en la Legislatura porteña sobre el expediente 1027/2021, presentado por el Club Platense y con el fin de lograr que se le otorgue en concesión el predio polideportivo ubicado en Manuela Pedraza y Crámer, del barrio de Saavedra.
Horacio Salvo, vicepresidente de Platense y uno de los principales impulsores del regreso, en diálogo con Doble Amarilla, señaló que “El estadio era la vida del barrio, porque albergaba otras disciplinas deportivas que hicieron grande a la institución. Canchas de pelota paleta, canchas de bochas, de bolos españoles, cancha de básquet y hasta un velódromo muy utilizado, hasta la construcción del velódromo municipal en Palermo”.
Y agregó que “Platense alquilaba esos terrenos a la familia Delcasse. Durante la dictadura de Lanusse y ante diferencias entre los herederos y el club, se judicializó la relación. Platense fue declarado inquilino pudiente y desalojado rápidamente. A partir de ese momento no sólo tuvo que deambular por distintos estadios para ejercer su localía, sino que además se perdió una gran masa societaria y de hinchas que dejaron de seguir al equipo”.
Asimismo, el dirigente de Platense contó que el club se haría cargo de “la administración del predio polideportivo existente para ponerlo a disposición de las escuelas del distrito escolar 10 y los vecinos del barrio, a la vez que refundaríamos la pertenencia calamar en toda la barriada de Núñez y Saavedra“.
En situación similar están los fanáticos de San Lorenzo, que se movilizaron de la misma forma a la Legislatura.
No obstante, Salvo advirtió que “La única similitud con San Lorenzo y su vuelta a Boedo es nuestro amor por volver a sentar nuestros colores en el barrio que tanto tiempo albergó el paso de los grandes equipos. Nos diferenciamos absolutamente en que nosotros no proyectamos ni proyectaremos nunca la construcción de un estadio de fútbol”.