Es el primer indicador oficial sobre el cierre de 2022 y está por encima de la estimación del Ministerio de Economía para todo el país.
Según informó la Dirección de Estadísticas y Censos del gobierno porteño el mes de diciembre acumuló un 5,8 % en la Ciudad generando un total anual de 93,4 %. Los aumentos que más abultaron el número se dieron en el sector de restaurantes y hoteles, que registraron un promedio de alza de precios del 9%, como resultado de los aumentos en los alimentos.
De esta manera, el Índice de Precios al Consumidor de la Ciudad de Buenos Aires (IPCBA) alcanzó el 5,8% en diciembre, igual número registrado en el mes de noviembre, lo que sumó un total anual de 93,4%.
En cuanto a los aumentos del último mes del año, los más pronunciados se registraron en restaurantes y hoteles, que tuvieron un promedio de alza de precios del 9%, como resultado de las subas en los alimentos preparados en restaurantes, bares y casas de comida.
En un segundo escalón aparece el rubro Vivienda, agua, electricidad y gas, que aumentó 6,3% debido a los aumentos en los alquileres y gastos comunes de vivienda. Luego, el rubro Alimentos y bebidas no alcohólicas, que registró un alza de 4,7%. En esta categoría, los principales impulsos provinieron de pan y cereales (+5%), leche, productos lácteos y huevos (+4,2%) y verduras, tubérculos y legumbres (+6,8%).
Otro escalón alto se dio en torno a la Salud que creció 6,3% debido a los incrementos en las cuotas de medicina prepaga y en los valores de los medicamentos, aunque en menor medida el equipamiento y mantenimiento del hogar registró una suba de 6,7%, al impactar los incrementos en las remuneraciones del personal del servicio doméstico. Le siguen los aumentos en los valores de los grandes electrodomésticos y de los artefactos para el hogar.
Sobre los que siempre aumentan en estas fechas, los ítems estacionales, alcanzaron un aumento del 7,1% en el mes, destacándose los incrementos en las tarifas del alojamiento en hoteles, junto con los aumentos en los precios de las prendas de vestir y de las verduras. En servicios, la suba fue del 6,1% y los bienes, se incrementaron 5,2%, en tanto que los precios de los rubros regulados se encarecieron un 5,1%.
Por su parte, Bienes respondió fundamentalmente a los incrementos en los precios de los alimentos (principalmente panificados, lácteos y verduras). En menor medida, se destacaron las subas en los valores de las prendas de vestir, de los automóviles, de los combustibles y lubricantes para vehículos de uso del hogar y de los medicamentos.
En cuanto al rubro Servicios reflejó principalmente los aumentos en los valores de los restaurantes, bares y casas de comida, de los gastos comunes de la vivienda y de los alquileres. Le siguieron en importancia, los incrementos en las cuotas de los establecimientos de educación formal y de medicina prepaga y en las tarifas del alojamiento en hoteles por motivos turísticos. En términos interanuales, ambas agrupaciones se aceleraron hasta: 96,2%.
Es el primer indicador oficial sobre el cierre de 2022 y está por encima de la estimación del Ministerio de Economía para todo el país.
Según informó la Dirección de Estadísticas y Censos del gobierno porteño el mes de diciembre acumuló un 5,8 % en la Ciudad generando un total anual de 93,4 %. Los aumentos que más abultaron el número se dieron en el sector de restaurantes y hoteles, que registraron un promedio de alza de precios del 9%, como resultado de los aumentos en los alimentos.
De esta manera, el Índice de Precios al Consumidor de la Ciudad de Buenos Aires (IPCBA) alcanzó el 5,8% en diciembre, igual número registrado en el mes de noviembre, lo que sumó un total anual de 93,4%.
En cuanto a los aumentos del último mes del año, los más pronunciados se registraron en restaurantes y hoteles, que tuvieron un promedio de alza de precios del 9%, como resultado de las subas en los alimentos preparados en restaurantes, bares y casas de comida.
En un segundo escalón aparece el rubro Vivienda, agua, electricidad y gas, que aumentó 6,3% debido a los aumentos en los alquileres y gastos comunes de vivienda. Luego, el rubro Alimentos y bebidas no alcohólicas, que registró un alza de 4,7%. En esta categoría, los principales impulsos provinieron de pan y cereales (+5%), leche, productos lácteos y huevos (+4,2%) y verduras, tubérculos y legumbres (+6,8%).
Otro escalón alto se dio en torno a la Salud que creció 6,3% debido a los incrementos en las cuotas de medicina prepaga y en los valores de los medicamentos, aunque en menor medida el equipamiento y mantenimiento del hogar registró una suba de 6,7%, al impactar los incrementos en las remuneraciones del personal del servicio doméstico. Le siguen los aumentos en los valores de los grandes electrodomésticos y de los artefactos para el hogar.
Sobre los que siempre aumentan en estas fechas, los ítems estacionales, alcanzaron un aumento del 7,1% en el mes, destacándose los incrementos en las tarifas del alojamiento en hoteles, junto con los aumentos en los precios de las prendas de vestir y de las verduras. En servicios, la suba fue del 6,1% y los bienes, se incrementaron 5,2%, en tanto que los precios de los rubros regulados se encarecieron un 5,1%.
Por su parte, Bienes respondió fundamentalmente a los incrementos en los precios de los alimentos (principalmente panificados, lácteos y verduras). En menor medida, se destacaron las subas en los valores de las prendas de vestir, de los automóviles, de los combustibles y lubricantes para vehículos de uso del hogar y de los medicamentos.
En cuanto al rubro Servicios reflejó principalmente los aumentos en los valores de los restaurantes, bares y casas de comida, de los gastos comunes de la vivienda y de los alquileres. Le siguieron en importancia, los incrementos en las cuotas de los establecimientos de educación formal y de medicina prepaga y en las tarifas del alojamiento en hoteles por motivos turísticos. En términos interanuales, ambas agrupaciones se aceleraron hasta: 96,2%.