El ajedrez es un juego de estrategia de mucha profundidad, que requiere concentración y habilidad del jugador. Grandes ajedrecistas de la historia empezaron a jugar el ajedrez desde la infancia.
La edición de este año de los Juegos Porteños organizados por la Subsecretaría de Deportes del Gobierno de la Ciudad, en conjunto con el Club de Ajedrez de Villa del Parque, estuvo protagonizada por jóvenes ajedrecistas de la ciudad.
Convocó a 64 participantes y la competencia se desarrolló en torneos mixtos individuales en la categoría Sub 16, Sub 14, y un torneo único para la categoría Sub 11. Participaron alumnos de establecimientos educativos de gestión pública y privada de la Ciudad, y quienes ocuparon los primeros tres puestos en las categorías Sub 14 y Sub 16 quedaron clasificados para competir en los Juegos Nacionales Evita.
El evento tuvo cabida en las instalaciones del club Villa Sahores, ubicado en la calle Santo Tomé 2496, de Villa del Parque.
El club Villa Sahores está presente desde 1931, con la llegada al barrio de la familia de don Miguel Murgo, amante del fútbol, quien fue su fundador.
Por otro lado los Juegos Porteños fueron instituidos por la Ley N° 3.569 de 2010 y tiene como objetivo la realización de competencias deportivas grupales e individuales, para participantes de ambos sexos entre 12 y 18 años con residencia en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires o que demuestren su concurrencia a las instituciones educativas de la misma.
Estos encuentros deportivos permiten fomentar el deporte como actividad de integración y contención social de los niños, niñas y adolescentes; estimular conductas solidarias y de trabajo en equipo; instaurar el concepto de competencia ‘junto al otro y no “contra el otro”, y considerar la práctica deportiva como factor promotor de salud psicofísica y calidad de vida.
Un niño puede empezar a jugar el ajedrez a partir de los cuatro años de edad. El juego, para él, puede tener distintas finalidades: diversión y entrenamiento; competición; mejoría de la concentración, la memoria y la creatividad; complemento a la educación y formación. Además, se reconocen muchos beneficios del ajedrez en las áreas del desarrollo intelectual, las habilidades y el estado emocional.