La emblemática navegación, que no se realizaba hace 80 años, recorrió el Riachuelo tras trabajos de limpieza, reuniendo fieles, autoridades locales e internacionales para honrar al santo patrono de Trani.
El sábado 16 de noviembre, el barrio de La Boca vivió una jornada única al conmemorarse el centenario de la devoción a San Nicola Pellegrino, patrono de la ciudad italiana de Trani, con una procesión náutica histórica que retomó una tradición suspendida por décadas. La actividad, organizada en colaboración con el Gobierno porteño y diversas entidades, destacó el vínculo cultural y religioso que une a la comunidad italiana con el barrio boquense.
La devoción a San Nicola Pellegrino comenzó en 1924, impulsada por Cecilia Croche de Lernia, quien buscó honrar al santo patrono de los tranneses en Argentina. Este año, el evento adquirió un carácter especial al celebrarse su primer centenario, con la participación de autoridades internacionales como el intendente de Trani, Amedeo Bottaro, su esposa Lucrezia Bruno, y otros representantes oficiales de la ciudad italiana.
El padre Alejandro León, párroco de la iglesia San Juan Evangelista de La Boca, destacó: “Este año 2024 la fiesta tuvo una solemnidad especial al celebrarse el primer centenario. Esta fue la primera procesión náutica que tuvo el barrio a comienzos del siglo XX”.
La procesión náutica fue posible gracias a los trabajos de limpieza del Riachuelo realizados por el Ministerio de Espacio Público e Higiene Urbana. Embarcaciones como el Eco Río, Elefante III y Elefante V, pertenecientes a la Dirección de Limpieza, acompañaron a la imagen del santo en su travesía, junto a dignatarios y fieles.
El recorrido comenzó y concluyó en Vuelta de Rocha, extendiéndose hasta las vistas del Río de la Plata. También participaron catamaranes barredores de la Ciudad, una embarcación de ACUMAR y una lancha del Círculo de Navegantes del Riachuelo, que escoltaron a la nave principal.
En un emotivo acto bajo el puente transbordador Nicolás Avellaneda, las autoridades realizaron una ofrenda floral en homenaje al santo y a la inmigración italiana.
El vicejefe de Gabinete, Gabriel Sanchez Zinny, representó al Gobierno de la Ciudad, acompañando a las autoridades de Trani durante la navegación. En un gesto de hermanamiento, hizo entrega de la bandera de la Ciudad de Buenos Aires al intendente Amedeo Bottaro.
El evento incluyó música en vivo, bandas tradicionales y una participación masiva de fieles y vecinos que se acercaron para ser parte de esta singular celebración religiosa y cultural.
El éxito de la procesión náutica reafirma el compromiso de la Ciudad con la preservación de sus tradiciones y con el mantenimiento del Riachuelo como espacio navegable y limpio. Esta iniciativa no solo honra una devoción centenaria, sino que también fortalece los lazos históricos y culturales entre Buenos Aires y las comunidades inmigrantes que forjaron su identidad.