La Ciudad Autónoma de Buenos Aires, bajo el influjo de condiciones climáticas adversas, ha puesto a disposición de sus habitantes un sistema de alerta y prevención ante las lluvias constantes y fuertes vientos que han asolado la región. Estos fenómenos meteorológicos, según informes especializados, se prevén prolongar durante todo el día de hoy y parte del día viernes. Como respuesta a esta situación, el Gobierno porteño ha desplegado un operativo de prevención y monitoreo, dirigido a garantizar la seguridad y el bienestar de la comunidad.
Para abordar problemas derivados de las lluvias y los vientos intensos, los vecinos de la Ciudad tienen a su disposición las líneas telefónicas de emergencia 103 y 911. Las llamadas recibidas en estos números se registran minuciosamente en un sistema que permite mapear las incidencias en un mapa de calor, proporcionando una representación visual de las áreas más afectadas por las condiciones climáticas extremas.
A pesar de que hasta el momento las intensas lluvias no han generado inconvenientes significativos, el Gobierno porteño ha tomado medidas preventivas. Diversas áreas de gestión gubernamental han sido movilizadas y están listas para actuar en caso de situaciones de anegamientos o emergencias que puedan surgir. En esta misma línea, se han realizado recorridos preventivos en zonas vulnerables y puntos críticos, como pasos bajo nivel, barreras de trenes y sectores que han presentado reclamos previos, con el objetivo de monitorear la situación. Se ha coordinado también la cobertura de guardias, tanto para la recepción de reclamos como para el despliegue de personal de verificación en las calles, ya que se prevé que el evento climático se extienda por más de 24 horas. Hasta el momento, se ha constatado el adecuado funcionamiento de las estaciones de bombeo y los pasos bajo nivel, estableciendo una guardia preventiva en el Paso Bajo Nivel Spinetta.
El plan de prevención implementado incluye la colaboración activa de diversas áreas gubernamentales para supervisar y adecuar vallados, asegurar el despeje de cunetas, la recolección de residuos, escombros, restos de poda, carteles y cualquier elemento que pudiera obstaculizar el flujo del agua. Asimismo, se mantiene un contacto constante con las diferentes áreas gubernamentales, dado que se anticipa la posibilidad de ráfagas de viento intensas que podrían agravar la situación.
El Centro Único de Coordinación y Control (CUCC) registró, hasta el mediodía, un total de 32 incidentes relacionados con el viento, sin reportes de inundaciones o anegamientos, los cuales han sido atendidos siguiendo los protocolos establecidos.
Aunque, hasta el momento, no se han registrado episodios climáticos de gravedad, el Gobierno porteño se encuentra preparado para actuar de manera coordinada en caso de que se emita un alerta meteorológico. En tal escenario, se activará el Plan Director de Emergencias, desencadenando un protocolo de respuesta que involucra a bomberos, brigadas de arbolado urbano, la policía, refuerzos de limpieza, agentes de tránsito, personal de pluviales y Defensa Civil, asegurando una respuesta efectiva ante cualquier eventualidad.
