A partir de mañana los amantes del arte podrán volver a recorrer las instalaciones del Museo de Arte Moderno de Buenos Aires. El edificio de San Juan 350 reabre sus puertas luego de permanecer cerrado por reformas. El nuevo espacio incorpora nuevas salas de exposición, amplía su espacio interno para darle lugar a las nuevas salas de educación y tienda de café. Los 11000 metros cuadrados que tiene el lugar incorporaran en marzo del próximo año una gran biblioteca con material de consulta para visitantes e investigadores.
Con motivo de la celebración de su reapertura se inaugurara por primera vez una exposición monumental que ocupa todas sus salas. La muestra se titula “Historia de Dos Mundos: Arte experimental latinoamericano en dialogo con la colección del MMK 1944-1989”. La curaduría fue realizada por el museo porteño, con colaboración del Museum für Moderne Kunst, de Frankfurt e incluye 500 obras de 100 artistas diferentes, pertenecientes a colecciones privadas de distintas partes del mundo. Con obras clave del periodo que ocupa los años 1944 a 1989, se podrán apreciar las obras de artistas como Antonio Vigo, Warhol, León Ferrari y On Kawara, entre otros creadores.
La exposición fue inaugurada en Alemania en el mes de Noviembre y llega al país para darle marco a la celebración del Museo de Arte Moderno de la Ciudad. Es la primera vez que un museo europeo abre sus puertas para que curadores latinoamericanos puedan revisarlas e incorporarlas a sus actividades. Desde el viernes próximo y hasta el 14 de Octubre se podrá visitar la muestra.
Por otro lado, y siguiendo con la renovación del MAMBA, la obra fue un trabajo monumental de diez meses. Lo que se logro fue duplicar el tamaño del espacio, que tenía 4000 metros cuadrados y paso a ocupar 11000. En total, cuenta con la misma superficie que tiene el histórico Museo Nacional de Bellas Artes, lo que lo transforma en uno de los museos más grandes de la Ciudad.
El Museo de Arte Moderno de Buenos Aires nació de una forma un tanto particular, fiel a su impronta artística moderna. Se colocaban esculturas en todas las calles de la ciudad, formando así un concepto de museo itinerante nuevo para la época. Ya en el año 1989 y después de pasar por varias sedes, se ubicó definitivamente en lo que antes fue una fábrica de cigarrillos.
