El incidente ocurrió en la calle Carranza 1424, donde se construye una torre de departamentos. Un obrero fue trasladado al Hospital Fernández con politraumatismos.
Este miércoles al mediodía, un nuevo accidente en una obra en construcción sacudió al barrio de Palermo, en la Ciudad de Buenos Aires. Una estructura de madera se desplomó en un edificio en construcción, ubicado en la calle Carranza al 1424, entre Cabrera y Niceto Vega, resultando heridos dos obreros.
El colapso ocurrió cuando los trabajadores se encontraban sobre una plataforma de madera a unos tres metros de altura. Según informaron fuentes cercanas al operativo de rescate, ambos cayeron al suelo tras el desplome y quedaron atrapados bajo los escombros. Las víctimas son un joven de 28 años y un hombre de 50, siendo este último trasladado al Hospital Fernández con politraumatismos, mientras que el primero recibió atención médica en el lugar por lesiones leves y no requirió hospitalización.
Bomberos de la Ciudad se desplazaron rápidamente al lugar y, tras descartar que hubiera más personas bajo los escombros, se enfocaron en asegurar la zona para evitar nuevos incidentes. Afortunadamente, al tratarse de una estructura interna de la obra, no hubo necesidad de evacuar las viviendas cercanas.
El Sistema de Atención Médica de Emergencias (SAME) también desplegó un amplio operativo con nueve unidades en la zona. Además de asistir a los heridos, los psicólogos del SAME brindaron contención emocional a los compañeros de los trabajadores afectados, quienes se encontraban en buen estado de salud pero visiblemente conmocionados por lo sucedido.
El desplome de estructuras en obras en construcción ha sido un problema creciente en la Ciudad de Buenos Aires durante este año. Este incidente en Palermo se suma a una serie de accidentes similares que han tenido lugar en distintos barrios porteños, algunos de ellos con consecuencias fatales.
Uno de los episodios más recientes ocurrió en una obra ubicada en las cercanías del Congreso de la Nación, en las calles Combate de los Pozos y Alsina. Allí, durante una demolición, cedieron los andamios dispuestos en la fachada del edificio, que cayeron sobre la vereda. Afortunadamente, no hubo víctimas que lamentar, ya que en ese momento no había trabajadores ni transeúntes en la zona afectada.
Sin embargo, no todos los incidentes relacionados con derrumbes han tenido finales tan afortunados. A comienzos de este año, en la avenida Pedro Goyena al 100, en el barrio de Caballito, el colapso de una medianera en una obra en construcción provocó la muerte de dos personas. El trágico suceso conmocionó a los vecinos y a la comunidad, y llevó al jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, a pronunciarse públicamente a través de sus redes sociales, donde expresó: “Mis más sentidas condolencias a las familias y amigos de las dos personas que trágicamente perdieron la vida en el derrumbe de la obra en construcción en Av. Pedro Goyena. Los abrazo en el dolor”.
Poco después, un nuevo desplome volvió a sacudir la Ciudad, esta vez en Río de Janeiro al 200, también en Caballito. En este caso, aunque el colapso de la mampostería provocó varios heridos, no se registraron víctimas fatales.
La problemática de los derrumbes en Buenos Aires no se limita a incidentes aislados. Un informe presentado en marzo por la ONG Defendamos Buenos Aires reveló que existen alrededor de 5.400 estructuras en la Ciudad que presentan un riesgo potencial de colapso. Este alarmante número incluye departamentos, edificios antiguos, casas y obras en construcción.
El informe también denuncia la falta de controles efectivos sobre las edificaciones, tanto en obras en curso como en construcciones antiguas. En particular, se destacan como puntos críticos las propiedades linderas a nuevas obras, los hoteles abandonados, casas usurpadas y edificios con mantenimiento deficiente.
Entre los barrios más afectados por esta situación se encuentran Belgrano, Núñez, Palermo, Almagro, Constitución, Liniers, Flores, Floresta, Villa Crespo y Villa Devoto. En estas zonas, la densidad de construcciones en riesgo es considerable, y las autoridades enfrentan el desafío de implementar medidas preventivas que eviten nuevos derrumbes.
El reciente accidente en Palermo pone nuevamente en evidencia la urgencia de reforzar los controles de seguridad en las obras en construcción de la Ciudad. La prioridad es garantizar que los trabajadores y vecinos no se vean expuestos a riesgos innecesarios, mientras se busca prevenir que este tipo de incidentes continúen sucediendo.
